A veces solo con unos leggings y zapatos de tacones altos,tacones de aguja.

A mi me excita caminar por el barro con zapatos de mujer de tacones altos y que seme hundan los tacones.

La última vez que me quedé atascado se me sopló la junta de la tapa de cilindros por la recalentda. Pero la reparación no me resultó muy costosa. Gaste mas dinero en reponer el par de tacones altos que arruiné en esa ocasión.

Conté varias veces que a mí me excita quedarme atascado vestido de mujer y con tacones altos y finos. Pero estuve pensando este último tiempo que tambien me excita el hecho de quedarme atascado aunque vaya vestido de hombre. Y como veo que en esta página a la gran mayoria no le satisface hacerlo vestido de mujer, decidí experimentar un cambio.
La semana pasada había llovido y pensé que en la construcción en la casa quinta seguramente la entrada estaría conbastante barro, y hacia allá me dirigí. Fui vestido con una camisa leñadora, vaqueros azul claro bastante ajustados, sobre todo en la parte de la cola, y me puse unas botas vaqueras. Son de cuero marrón y tienen un taco grueso pero de 7u 8 centimetros. Y me las coloque por encima de laspiernas del vaquero.
Una vez en la quinta me subí a una f-100 modelo 62 que allí tenemos y salí a dar unas vueltas. Había tramos en que las ruedas giraban bastante y me hizo poner duro. Cuando volvía tomé por el caminodel monte, donde había barro suficiente para quedarme atascado.
Me encontre con un charco demasiado grande y no podía saber cuan profundo era,por loa que decidí rodearlo por una parte de pasto. Pero estaba muy blando y cuando me dí cuenta, ya estaba atascado. Comencé a darle adelante y atrás varias veces, pero cada vez me atascaba más. Yo hundía mibota en el acelerador con fuerza mientras me balanceaba en el asiento.
Abrí la puerta y miraba la rueda trasera como patinaba y se seguía hundiendo. Estaba demasiado caliente. No aguante más y comencé a masturbarme frenéticaente. No tarde en llegar y dejar mis vaqueros llenos de semen.
Cuando levanté la vista ví a unos 30 metros a un tipo que estaba observando. Y me pareció era que él tambien se estaba tocando sobre el vaquero. Después se acercó y me ofreció ayuda. Vino con un tractor y en pocos minutos sacamos la camioneta del barro. Pero lo mejor vino despues. Estuvimos conversando largo rato y palabra va palabra viene, descubrimos que a ambos nos excitaba ver atascos o quedarnos atascados nosotros mismos. Habia encontrado un alma gemela.
Ya charlamos un par de vece3s y quedamos que para la próxima lluvia trataríamos de salir juntos. Cuando volví me masturbé varias veces imaginando lo que íbamos a hacer en esa salida. Ahora solo espero que me avise cuando.
Creo que al final el cambio que realizé dio frutos. Ustede3s medirán si hice bién o no. Espero alguna opinión, y que les guste el relato. Si es así, cuando salga con mi nuevo amigo, se los contaré. Abrazos a todos.

Son super videos de super atascos. Un verdadero maestro.

¿Como es eso?.

Buen relato.

La Plata, Argentina.

¡Lástima!. No la pude traducir.

ja, muy bueno.

Si. Lástima que no lo volví a ver. Tuve una situación similar con otro tipo, pero me fue mal. me echó la culpa de haberse atascado y me pegó con un fierro. Otro día la cuento. Bah, si ustedes quieren. Yo todavía soy nuevo en el sitio. Si ustedes lo quieren cuento mis cosas. Sino espero. Abrazo.

Esto sucedió cuando yo tenía 17 o 18 años, pero son cosas que no se olvidan nunca. Faltaban dos días para que mis padres regresaran de Capital, por lo que me encontraba a solas en la quinta. Mi madre había dejado con llave la puerta de su dormitorio, porque tenía la sospecha que yo una vez había usado unos zapatos de ella. Pero yo me las rebusqué igual. Yo tenía escondida una falda escocesa que le había sacado a mi prima y en el depósito había unos mocasines de mujer con un moñito en la capellada que habían sido de mi hermana y ya no usaba. Esa mañana yo estaba sentado en la galería con la falda puesta y los mocasines. Tambien me había puesto unas medias largas de color negro.

De pronto escucho el motor de un vehículo y pegué un salto y me metí adentro. Era el chico del reparto de gas que venía a cambiar los tubos. Él ya me había visto antes con falda y hasta con tacones y llegamos a unos tímidos manoseos, pero yo todavía sentía vergüenza en mostrarme así vestido.

Llegó con la camioneta hasta donde estaba la cabina del gas, y le costo bastante por el barro que había. Yo fui hasta el ventanal y corrí un poco la cortina para poder mirar bien. Podía ser que cuando maniobrara para pegar la vuelta se atascara. Bah, para decir la verdad, yo estaba rogando que se atascara. Cambió los tubos, subió los vacíos a la camioneta y se dispuso a marcharse. Yo estaba con la cara pegada a la ventana y ya con la pija dura esperando la maniobra.

¡Y se me dio!. Cuando le dio en reversa para pegar la vuelta se atascó. Las ruedas traseras habían llegado al lugar donde el suelo era más blando y yo veía como se hundían. Obviamente cuando aceleró, se quedó atascado. las ruedas giraban y no podía salir. Intentó varias veces hacia ambos lados, pero cada vez se enterraba más. Yo ya tenía la mano bajo la falda y me estaba masturbando frenéticamente. Acabé como un caballo, dejando el vidrio y la cortina llenos de semen. ¡Y todavía faltaba lo mejor!.

Me estaba limpiando cuando escucho que golpea la puerta de la galería. Me sobresalté, y no sabía si atenderlo así vestido. Debería haberme cambiado, pero la calentura todavía me duraba y abrí tal cual estaba. Me dijo que se había atascado y me pidió una pala. Yo se la alcancé y vi que me miraba las piernas, pero no dijo nada. Quizás su preocupación lo tenía mal. Sacó un poco de barro de las ruedas y volvió a probar, pero sin resultado alguno. Seguía atascado.

De pronto me hizo una seña para que fuera y yo me acerqué tímidamente. Me preguntó si sabía conducir, y le dije que sí. Me preguntó si me animaba a acelerar la camioneta mientras el empujaba para ver si podía sacarla. Rápidamente le dije que sí y me subí al vehículo. Me dijo que acelerara hacia adelante y hacia atrás y el empujaría de costado. Comencé a maniobrar y sentía las ruedas girando a full. Al mismo tiempo veía mis pies con los mocasines de mujer sobre los pedales y la falda que se me subía al moverme en el asiento. Y seguía atascado. Además lo veía a él empujando con sus brazos musculosos ¡Fue cómo tocar el cielo con las manos!. Y la cosa mejoró.

La camioneta casi sale para un costado y el me dijo que parara. Me hizo correr a un costado del asiento y tomó el el volante. Yo creí estar en la gloria. Con mi falda y mis zapatitos de mujer, junto a un chico que trataba de sacar la camioneta del atasco. Ya tenía la pija dura de nuevo y con cada acelerada me temblaba. No pude aguantar más y comencé a tocarme. Él se dio cuenta y me preguntó si estar "atascada" con él me excitaba. Le contesté que mucho. Entonces sacó su pija del pantalón y me dijo que atendiera también la suya. No lo podía creer. Estaba en una camioneta atascada, escuchando girar las ruedas en el barro, y con una pija en cada mano.

De pronto la camioneta salió del barro y la frenó más adelante, pero me dijo que continuara. Ya más distendido acabó enseguida. Yo tardé unos segundos más y también acabé. Nos bajamos y después de lavarnos, me dijo que se tenía que ir porque estaba retrasado en el reparto. pero que iba a volver cuando pudiera. Por distintas circunstancias nunca más lo vi, pero bien que lo recuerdo. Al día siguiente fui a ver las huellas dejadas por las ruedas en el barro y me masturbé como loco.

Espero la lean y les agrade. Les aclaro que solo escribo historia verdaderas. Por ese motivo no pongo diálogos. Es poco probable que me acuerde las palabras dichas o escuchadas hace tanto tiempo.

Gracias sirstuck. Yo sigo tus videos de you tube. Son realmente muy buenos. Me ponen caliente.

De niño había visto varias veces a mi padre con el auto atascado en el barro en la puerta de casa. Viviamos en una calle de barro. Y cuando mi madre se bajaba del coche, yo veía como se le hundían sus stilettos en el barro. Esa cosas me marcaron de por vida.
Mi primera vez atascado fue a los 15. Mi padre estaba de viaje y mi madre había ido a visitar a unos tíos. Mi casa era la única de la manzana y enfrente había un campo. Ese día tenía todo el tiempo a solas. Me puse unas medias de nylon debajo del jean, y unos zapatos de tacones altos de mi madre, y fui a sacar el auto de la cochera.
En el parque de casa había algunos charcos de agua y decidí "jugar" un poco ahí. Le daba para atrás y para adelante en un espacio de 5 metros haciendo patinar un poco las ruedas, mientras veía mis tacones altos maniobrando en los pedales. Y me puse duro.
Y por mirar mis pies me distraje un segundo y al darle hacia atrás no frené a tiempo y mis ruedas trasera fueron a dar a la zanja del desagüe. Traté de sacarlo pero el auto era de tracción trasera y las ruedas giraban en el mismo lugar. Me di cuenta que estaba atascado. En un primer momento me asusté y aceleraba desesperadamente tratando de sacarlo, pero la sensación de estar encajado me excitaba cada vez más y me rendí al placer. Saqué la pija fuera del jean, y mientras hacía los cambios con la mano derecha, con la izquierda comencé a masturbarme. Cuanto más me encajaba, más caliente estaba, y recuerdo que repetía "Ay, que divino, cómo me atasco".
Cuando bajé vi que las ruedas estaban enterradas casi hasta la mitad, y mis tacones altos se hundían en el barro a cada paso. Estaba recaliente. Volví al auto y seguí acelerando para ver como me atascaba más y más. Y despues de varias aceleradas a fondo, acabé como nunca antes lo había hecho. Esa noche al recordarlo, me masturbé tres veces más.

Haganme saber si en algo les gustó. Abrazo.